6 preguntas frecuentes antes de realizarse un proceso de ortodoncia

La Ortodoncia es una rama de la odontología que se encarga de la corrección de los dientes y huesos que se encuentran en una posición incorrecta en la boca, a través del uso de dispositivos conocidos como brackets o alineadores invisibles (frenillos dentales).

Definitivamente, para muchos de nosotros, los frenillos fueron de gran ayuda para apropiarnos de nuestra sonrisa y sentirnos mejor con nosotros mismos.

Por eso, hoy queremos compartir con usted algunas de las preguntas frecuentes que siempre nos hacen en consulta, de forma que se decida a ponerse frenillos y gozar de sus maravillosos beneficios. ¡Nos encantará asesorarle!

¿Para qué sirven realmente los frenillos o brackets?

Básicamente, para enderezar los dientes y corregir problemas con la mordida, mejorando la calidad de vida y la apariencia de la persona. Pueden cerrar o crear espacios entre dientes, según se necesite.

Además, unos dientes bien alineados reducen la posibilidad de sufrir ciertos problemas bucodentales, como la acumulación de placa y sarro que se convierten en caries.

Eso sí, los frenillos no blanquean los dientes, pero tras quitarlos, podemos realizar otro tipo de tratamientos complementarios para mejorar el color y el brillo de las piezas.

¿Por qué debo ir a citas mensuales cuando tengo frenillos?

Un tratamiento con frenillos requiere pequeños ajustes y sustituciones a lo largo del tiempo, por lo es necesario asistir a las citas para las correspondientes revisiones. En esas citas, por ejemplo, se cambian las ligas (¡usted podrá elegir el color!) y se ajusta el arco.

¿Me puedo poner brackets a cualquier edad?

La mayoría de las personas optan por ponerse frenillos cuando son niños o adolescentes, después de que botaron los dientes de leche, porque los nuevos salen un poco deformados.

Pero la verdad es que cualquier persona (a los 20, 30, 40 o más años) puede hacerse un tratamiento de ortodoncia para mejorar la apariencia de su sonrisa y la mecánica al masticar y comer. Nunca es tarde para mejorar su sonrisa y salud bucal.

¿Tener brackets duele?

Los brackets no generan dolor como tal, pero si pueden resultar un poco molestos cada vez que son ajustados para alcanzar los objetivos propuestos por el ortodoncista. Algunas veces, si se colocan frenillos metálicos aparecen pequeñas llagas que se curan en pocos días.

¿Puedo seguir comiendo de todo si uso frenillos dentales?

Sí. A veces, los primeros días tras el ajuste mensual de los brackets, es posible sentir molestia al morder alimentos muy duros como carne asada o ciertas galletas. Pero eso se quita pronto. Además, es un buen tip cortar los alimentos duros en trocitos.

¡Y es una excusa perfecta para comer mucho helado!

¿Puedo seguir llevando una vida normal, como hasta ahora, aunque tenga brackets?

Absolutamente. Se puede tocar instrumentos musicales de viento, se puede hacer actividad física (aunque hay que tener cuidado con el deporte de contacto, para no ser víctima de un golpe en la boca. Lo mejor es siempre usar un protector bucal).

Incluso, con los frenillos es posible dar y recibir besos, cantar Karaoke, hablar con normalidad y todo lo demás.

Si tiene alguna otra duda, contáctenos de inmediato. Estaremos honrados de atenderle en nuestras clínicas de Quepos, Pérez Zeledón y Palmar Norte.

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